Después de tantas y tantas larguísimas semanas... ¡¡¡13!!! sin moverse la báscula, hoy me sorprende con un 73,2... ¡casi medio kilote menos que la pasada!... ¡casi como en los "buenos tiempos" del bajón!... (bueno, no tanto, no nos "pasemos")... pero sabes... sin haber hecho nada "especial", quizá que la semana estuvo un poco agitadilla, con un viaje de por medio a Berlín... decepcionante ciudad... a mi gusto, por lo "sosa" que la encontré, pero eso será otra historia en párrafo aparte... Bueno, la cuestión es que la "estable y entrañable" zanahoria debe haberse "desoxidado" y esta vez se ha movido, y además, en el sentido oportuno... que intentaremos no invertir... acercándose un pelín más a la meta.
Mírala como va...

Bueno, a ver si retoma el "ritmo decreciente" y nos sigue sorprendiendo... y a ver si logramos pronto quitar el 7 inicial de esta cifra... de una vez y por todas...
Pues si amigos, como les comentaba antes, estuve en Berlín...
A veces es malo viajar con demasiadas espectativas, con ideas preconcebidas y creyendo la opinión generalizada de que vas a visitar una gran ciudad... y puede que eso me haya sucedido, pero la verdad es que en mi opinión es un "ciudadón" bastante "soso y muerto"... casi ni tráfico había... con personas afables pero con un carácter muy diferente a nuestro carácter "latino"... con otra "chispa"... otras costumbres, otras formas de manifastarse y expresarse muy diferentes... y eso que con esto de "la globalización" se supone que ya algo de lo malo nuestro se les tendría que haber "pegado"...
Ahora me explico por qué en España nos "llenamos" de turistas alemanes cada año, y por qué todos los que pueden intentan quedarse a vivir en este país...
Quizás me apresure a opinar sin apenas haber conocido la cuidad... sólo estuve 48 horas y de ellas la mayoría trabajando... pero la verdad es que si dependiera de mi, no creo que la curiosidad sea tanta como para que regrese a "experimentar" si mi criterio es erróneo o certero, al menos en un buen tiempo... ya os lo comentaré si lo decido.
Así y todo, siempre quedó un tiempito para dar un paseo y sacar algunas fotos (de lo mejorcito por donde pasé) que fue en el barrio llamado Mitte (Centro en alemán) por lo que se supone sea el más "movido" por ser la principal área comercial, político - administrativa y de negocios...

En la cena de trabajo... elocuente manera de resaltar el contenido de la fuente de aperitivos, con excelentes quesos, diferentes tipos de empanadas, frutas y verduras, patatas, ensaladillas, encurtidos y un rico pan de ajo (con el jamón en España "nos llevamos la palma", sin duda...) con esa bengala, quizás, todo lo demás pasaba desapercibido... por suerte se apagó a los pocos segundos... y pudimos concentrarnos en el "de todo un poco"...
No te pierdas el video del Retaurante y Café Nö!...
http://tv.cityguide.com/services/player/bcpid1911416548?bctid=1435496571
El "Bocca di Bacco", famoso restaurante Italiano situado en la calle Friedrichstrasse, principal arteria comercial de la zona, donde se encuentran las más conocidas Boutiques de marcas, por la que seguiremos andando hasta el márgen del rio Spree.

Aquí estoy en la entrada de una de las Salas con más historia del viejo Hospital "Charité", la más antigua... en la planta superior del edificio vivían los Doctores con sus familias y en la planta baja tenían la Clínica... durante la época de la Alemania Nazi en este edificio parieron las mujeres de muchos de los altos oficiales y cargos del tristemente célebre Adolf Hitler.
http://es.wikipedia.org/wiki/Charit%C3%A9










Un skyline no sólo sirve para hacer un fondo de pantalla o una camiseta, también nos permite descifrar la historia. Esta silueta en el horizonte refleja el poder religioso, militar, político o económico que ha tenido o tiene una ciudad. Y es que el skyline de una ciudad es la 'vectorización' de su historia, pues representa en coordenadas XY la arquitectura a lo largo del tiempo. Es el tiempo el que va incorporando nuevas líneas a la silueta de la ciudad. Existen ciudades donde el tiempo se paró y su skyline, también. Segovia y Toledo son dos buenos ejemplos de ello. En Madrid la línea del cielo ha ido cambiando a lo largo de la historia, eso sí, muy lentamente. 












