Pero para mi sólo va a ser el día 26 de la cuenta atrás este que estoy viviendo... si vuelven mañana verán que será el 25...
Ya estoy de vuelta, me fui con la ilusión de que al pesarme despúes de dos días, a diferencia de lo habitual, me iba a pegar un "sustazo" de los buenos, porque suponía que la pérdida iba a ser "brutal"... decepción... han sido los días que menos he bajado, y eso que han sido días ajetreados en los que pensé que iba a "quemar" más energía que de costumbre... conclusión: como en "casita" en ningún otro sitio. 0,4 kiletes (se repite el número de marras que habréis visto en días anteriores, pero esta vez en dos días)... a razón de 0,2 kiliquis por día... que la verdad que no es ningún record, ni como dice mi entrañable amigo Agustín: "ninguna noticia como para escribir a casa"...
Pero como soy como soy, lo miro desde el lado bueno y pienso... ¿cuántos por ahi no querrían bajar 200 gramitos por día?... ¿no les parece?... entonces, me pongo las "orejeras" y sigo tirando pa`lante "erre que erre" con mi "letanía" hasta que me de un cabezaso con los 100 kilos de la meta... y luego, hasta a lo mejor, siga (eso tenemos los burros, que cuando nos da por algo...).
Mi pobre zanahoria, despúes del tirón de hace dos días, parece que se ha puesto remolona... De todas maneras, mirándola con buenos ojos, tiene gran parte del camino andado, también tiene derecho a un descansito.
En realidad, mi Cirujano me pidió bajar los 10 kilos para el día de la operación, 24 de junio (San Juan)... pero yo lo que quiero es llegar el 16, que es el día de la última consulta, y "sorprenderle" con los 10 kilos "superados"... y bajar alguno que otro en la semanita restante.
Lo importante de este bajón repentino de peso en tan poco tiempo es llegar a quirófano con "la tripa floja", además, que la primera grasa que se suele quemar es la que rodea al hígado... resulta que ambos dos factores facilitan la visibilidad durante la endoscopia.
Ayer, que no estuve por aquí, fue día 29... si hubiera estado les hubiera contado que era mi día de comer ñoquis... es costumbre uruguaya (que no lo soy, pero me encantan las tradiciones) que si comes ñoquis los 29 y pones una moneda debajo del plato, el mes siguiente te entra más plata por alguna razón (a mi no me ha fallado y os lo recomiendo, aunque todo sea dicho, no me he hecho millonario...) Pero lo anecdótico del caso es que durante mucho tiempo que estuve tomando mis ñoquis en el restaurante (uruguayo) de siempre, el camarero, muy dicharachero, atento, alegre y sobretodo, muy gritón, como buen asturiano, siempre decía: "recordar que para que traiga buena suerte, la moneda la debéis dejar de propina"... hace un par de meses, o tres, "desaparece" el camarero y en su lugar viene la hija del dueño a sustituirle, (uruguaya "de pura cepa", por cierto), y después de los consabidos ñoquis, al ver que yo no guardaba la moneda en el momento en que ella retiraba el plato me dice: "recordá que la moneda te la tenés que llevar y tenerla contigo algunos días para que te de suerte"... Ahí fue cuando me expliqué el por qué de cuando le pregunté por el camarero, ella me respondió, con cierto rubor, un escueto: "es que ya no está con nosotros"...
viernes, 30 de mayo de 2008
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