Ya yo en mi caso, a más de año y medio de mi operación, he llegado a la fase de "mantenimiento"... y haciendo honor a la fase en la que me encuentro, sigo manteniéndome, valga la redundancia... con poco esfuerzo, es verdad, pero siempre intentando lograr un "equilibrio" con relación a lo que como, a pesar de que a estas alturas no me limito en relación a lo que como. Eso si, me cuido en limitarme con relación a cuanto como, recordando siempre uno de los primeros consejos de mi cirujano: "en cuanto sientas el primer indicio de saciedad, para de comer"...)
Cirugía bariátrica: consiguiendo mejoras a largo plazo en el peso y la salud de personas que viven con obesidad severa.
Agosto de 2009.- La prevalencia de la obesidad, definida como un índice de masa corporal (IMC) superior a 30 kg/m2, está aumentando en todo el mundo a un ritmo alarmante y la OMS prevé que en 2015 más de 700 millones de personas en el mundo serán obesas.
1 La prevalencia de la obesidad en Europa se sitúa en el intervalo del 10-20% en hombres y del 15-25% en mujeres.
2 Se estima que sólo un uno por ciento de las personas que padecen obesidad reciben un tratamiento adecuado.
La obesidad está asociada tanto a morbilidad (enfermedad) como a mortalidad (muerte). Las comorbilidades asociadas a la obesidad son enfermedad cardiovascular (principalmente cardiopatía e ictus), diabetes tipo 2, trastornos musculoesqueléticos, apnea del sueño y algunos tipos de cánceres1. La obesidad con sus consecuencias en la calidad de vida y consecuencias psicosociales aumenta no sólo los costes para la salud sino también la carga socioeconómica.3
Una necesidad creciente de tratamientos a largo plazo para la obesidad
A medida que aumentan los niveles de obesidad y de obesidad severa en todo el mundo, crece la demanda de medidas médicas y sociales eficaces para atajar esta creciente epidemia. Para que el tratamiento para la obesidad tenga éxito (en el sentido de que se produzca una reducción de peso significativa y duradera y una mejoría importante en la enfermedad asociada a la obesidad mórbida) hay que centrarse en el tratamiento a largo plazo que proporciona beneficios duraderos en el tiempo.
La cirugía bariátrica abarca diversos procedimientos quirúrgicos cuyo objetivo es restringir la ingesta de alimentos de los individuos obesos reduciendo el tamaño y la capacidad del estómago. Estos procedimientos actúan o bien reduciendo la cantidad de alimento que un individuo puede ingerir en una comida y/o haciendo que el individuo absorba ligeramente menos del alimento y de los nutrientes que come (malabsorción). Varias décadas después de que se utilizase por primera vez, la cirugía bariátrica constituye actualmente una parte establecida e integral del manejo de los pacientes con obesidad mórbida.3 Las técnicas quirúrgicas han evolucionado rápidamente y hoy en día los cirujanos especializados pueden realizar 4 tipos de procedimientos: banda gástrica, derivación gástrica (bypass), resección gástrica en manguito, derivaciones biliopancreáticas.3 Dado que la obesidad mórbida es un síndrome complejo, la mayoría de las unidades de cirugía de la obesidad adoptan un enfoque multidisciplinar, en el cual un amplio abanico de profesionales sanitarios especializados trabajan conjuntamente para solucionar las necesidades individuales de cada paciente. Además de la cirugía regular, este equipo ofrece consejos nutricionales, consejos dietéticos y psicológicos, seguimiento a largo plazo y consejos sobre la actividad física posoperatoria.
La intervención quirúrgica está recomendada en pacientes con obesidad mórbida (IMC ≥ 40 kg/m2) y en pacientes con obesidad severa (IMC > 35 kg/m2) con comorbilidades, como diabetes o enfermedad cardiovascular, en los cuales se espera que la cirugía mejore el trastorno.3 El número de procedimientos quirúrgicos bariátricos que se están llevando a cabo ha aumentado significativamente durante la última década4 y los beneficios para la salud a largo plazo de la cirugía para la obesidad se están demostrando en ensayos clínicos que se prolongan hasta 15 años después de la cirugía.5,6
El índice de masa corporal (IMC) es un índice simple de peso por altura que se utiliza habitualmente para clasificar el sobrepeso y la obesidad en poblaciones e individuos adultos. Se define como el peso en kilogramos dividido por el cuadrado de la altura en metros (kg/m2).
La cirugía bariátrica mejora el peso y la salud cardiovascular después de dos años
Dos años después de la cirugía, los pacientes que se han sometido a ella pueden beneficiarse de la disminución de peso, y lo que es más importante, de la reducción de los factores de riesgo cardiovascular.7 El estudio Sueco de Sujetos Obesos (SOS), en el que participaron 4.047 sujetos obesos de Suecia, comparó los resultados en un grupo tratado con cirugía bariátrica con los de un grupo control que recibieron tratamientos “convencionales” que iban desde una intervención sofisticada en el estilo de vida y modificación del comportamiento, hasta, en algunas consultas, ningún tratamiento adicional. Después de un período de seguimiento de dos años, el grupo tratado quirúrgicamente había conseguido una disminución de peso del 23,4% comparado con un aumento del 0,1% en el grupo control.7 Además, de una disminución significativa en el peso, el grupo quirúrgico presentó una incidencia notablemente menor de diabetes, hipertrigliciridemia (niveles elevados de triglicéridos en la sangre) e hiperuricemia (niveles elevados de ácido úrico en la sangre) comparado con el grupo control.7 La recuperación de la hipertensión, diabetes, hipertrigliceridemia, un bajo nivel de colesterol HDL e hiperuricemia era más frecuente en el grupo quirúrgico que en el grupo control.7
Un estudio demuestra unos beneficios para la salud continuados al cabo de 10 y 15 años
El estudio SOS advirtió que la pérdida de peso que se observaba en los pacientes tratados quirúrgicamente a los dos años se mantenía después de pasados diez años.7 Tras una década, el peso del grupo tratado quirúrgicamente había disminuido en un 16,1%, mientras que el peso del grupo tratado convencionalmente había aumentado en un 1,6%.6 Además, el grupo tratado quirúrgicamente continuó mostrando mejorías en los factores de riesgo cardiovasculares.7 En particular, la incidencia de diabetes era significativamente menor para el grupo tratado quirúrgicamente (7%) comparado con el grupo control (24%)5. La tasa de recuperación de diabetes era significativamente mayor en el grupo tratado quirúrgicamente (36%) comparado con el grupo control (13%)7.
Después de 10 años, el grupo tratado quirúrgicamente experimentó una mejoría en su estilo de vida, demostrado por una ingesta de energía significativamente menor y un aumento de la actividad física, comparado con el grupo control.7 Cuando se seguía a estos mismos pacientes durante 15 años, el grupo del estudio SOS observó que la cirugía bariátrica estaba asociada a una notable reducción en la mortalidad global.5
El tratamiento quirúrgico de individuos con obesidad severa consigue la mayor pérdida de peso, que también es más duradera, en comparación con otros métodos.7 La cirugía bariátrica proporciona beneficios a largo plazo demostrados en individuos obesos, especialmente al mejorar los factores de riesgo de enfermedad vascular y de diabetes.7 A pesar de estos alentadores datos, sólo un pequeño número de personas que podrían beneficiarse de la cirugía bariátrica reciben tratamiento en la actualidad. Sin embargo, dadas las crecientes tasas de obesidad en todo el mundo, es probable que los resultados beneficiosos a largo plazo de la cirugía bariátrica sean cada vez más importantes en el futuro.
Referencias bibliográficas
1. WHO Fact sheet N°311. Obesity and overweight. Accessed 10 July 2009. Available at: http://www.who.int/mediacentre/factsheets/fs311/en/index.html
2. WHO Obesity in Europe. Accessed 10 July 2009. Available at: http://www.euro.who.int/obesity
3. Fried M et al. Interdisciplinary European guidelines for surgery for severe (morbid) obesity. Obesity Surgery 2007;17:260-270
4. Steinbrook R. Surgery for severe obesity. NEJM 2004;350:1075-1079
5. Sjöström L et al. Effects of bariatric surgery on mortality in Swedish obese subjects. NEJM 2007;357(8):741-752
6. Bockelbrink A et al. Evaluation of medical and health economic effectiveness of bariatric surgery (obesity surgery) versus conservative strategies in adult patients with morbid obesity. HTA report N°DAHTA073 2008. Accessed 03 July 2009. Available at: http://gripsdb.dimdi.de/de/hta/hta_berichte/hta203_summary_en.pdf
7. Sjöström L et al. Lifestyle, diabetes, and cardiovascular risk factors 10 years after bariatric surgery. NEJM 2004;351(26):2683-2693